Mi experiencia con las monedas

Hace casi una semana tuve la oportunidad de asistir en Sevilla a un taller de iniciación a la magia con monedas impartido por el gran Juan Luis Rubiales. Nunca antes había asistido a ningún tipo de reunión de magia y tengo que decir que la experiencia fue inolvidable. Repetiría una y mil veces.

Rubiales es un conocido mago gaditano que creó este curso porque, al contrario que con la cartomagia, donde hay muchos libros de iniciación, en monedas no los hay y es difícil comenzar. Los libros que explican efectos con monedas son muy complejos y, tal y como nos dijo Rubiales, "es para que le perdamos el miedo a las monedas". Sin duda fue una tarde asombrosa en la que estuvimos alrededor de 10 discípulos aprendiendo de un gran maestro de la numismagia y dándonos ideas y consejos unos a otros. Con él también vino Pedro Morillo, otro mago de Cádiz que nos aportó otra visión profesional a los efectos y el selfie-sorpresa de su móvil.

Por supuesto he conocido a gente fantástica. Me alegro muchísimo de haberme inmerso un poquito más en este mundo porque, gracias a ellos, he dado el paso de entrar en el Círculo Mágico de Sevilla, pero eso ya te lo contaré en otra entrada. Ésta es sobre Rubiales y las monedas.

¿Por qué he decidido publicar esto hoy? Pues porque hoy es el cumpleaños de Juan Luis Rubiales y tenía ganas de felicitarlo con algo más que un simple "felicidades", así que desde aquí le deseamos todos un gran feliz cumpleaños y que, por supuesto, cumpla muchos más llenándonos la vida de magia e ilusión.

En el taller no solamente aprendimos juegos con monedas, sino que nos enseñó magia de verdad. Tiene muy medida la parte teórica de la magia y eso también es más importante aún que el efecto. Esos mínimos detalles que nos hacen falta a todos y a él lo hacen único.

Nos enseñó Magia porque fue pasárnoslo bien aprendiendo el arte que nos gusta. Nos reímos mucho, tanto con Rubiales como con los demás. Rubiales es muy simpático, muy gracioso y, aunque, como él dice, un poco bruto, es un mago de los pies a la cabeza y se nota que hace lo que verdaderamente le apasiona.

Como ya te he dicho fue una experiencia inigualable.

Yo ya admiraba a Rubiales de antes...imagínate ahora que lo conozco y encima me ha dado clase. Ah, y me hice una foto con él también, claro. No podía faltar.

Con asombro, recibimos una grata sorpresa.

Se presentó allí el padre de la cartomagia tal y como la conocemos. El escritor del libro por el que todos los magos empezamos en cartomagia. Un libro...digamos...fundamental.

Efectivamente. Me estoy refiriendo a Vicente Canuto.

Cuando lo vimos entrar fue como una sensación doble: entusiasmo por conocerlo y rabia. Rabia porque si lo llegamos a saber nos llevamos el libro y le pedimos que nos lo firme, lógicamente.

¿Este es otro hombre al que hay que admirar porque ha escrito un libro? No. Este es un hombre al que hay que admirar porque ha escrito EL libro. El libro por donde todo cartomago empieza y se apasiona. Si vas a empezar en magia te recomiendo leer lo importante que es un buen profesor y por qué Vicente Canuto lo es en mi entrada "El Profesor".

Fue todo un honor también compartir un mínimo de conocimientos con este genio de la magia con cartas.

Además, tiene una habilidad con monedas impresionante. Yo estaba sentado casi a su lado y alucinaba.

Tampoco podía faltar otra foto con este grande de la magia. Está claro.

Fueron casi cinco horas disfrutando con estas personas.

Casi cinco horas de risas y asombros.

Casi cinco horas de magia.

Quiero agradecerle a Rubiales el haber creado este taller porque ha conseguido su objetivo. Le he perdido el miedo a las monedas y posiblemente, cuando me vuelvas a ver haciendo magia, algo de monedas verás.

Quiero darle las gracias también a Vicente Canuto por su aportación a la magia y por haber estado allí con nosotros ayudándonos. Al igual que a Pedro Morillo.

Y no me podía ir de aquí sin agradecerles a mis compañeros esta fantástica experiencia.

Así qué muchas gracias, Josema, Fernando, Jose Ángel, Rafael, Manuel y Pedro.

Fue todo un honor pasar esa tarde con vosotros y espero volver a veros pronto.